Investigadores se reúnen en el CUCSH como parte de un proyecto del Centro Maria Sibylla Merian de Estudios Latinoamericanos Avanzados para hablar sobre los conflictos y los procesos de paz que surgieron en la región.

Parece una ironía, pero en América Latina la paz y la violencia se entrelazan. Así como esta región ha sido escenario de terrorismo de Estado, crisis humanitarias y crímenes de lesa humanidad, también se han gestado procesos de pacificación, reivindicación de las víctimas y reconciliación social que fueron ejemplos para el resto del planeta.

Un ejemplo: la dictadura en Argentina dejó a 30 mil desaparecidos y miles de bebés arrebatados a sus padres. De ese dolor se gestó el movimiento de las Madres de la Plaza de Mayo y una histórica sentencia como resultado de los procesos de Memoria, Verdad y Justicia. No es el único caso icónico. Otros son la instalación comunitaria de memoriales en sitios donde hubo masacres contra inocentes de parte del narcotráfico en México, o las luchas para reivindicar los derechos de las mujeres en la región ante años y años de agresiones género por parte del Estado y la sociedad.

Este tipo de temas serán analizados desde una perspectiva interdisciplinaria por el Laboratorio de Conocimiento: Visiones de Paz, que tendrá una duración de 18 meses y es dirigido desde la Sede Regional Centroamérica y el Caribe, del Centro Maria Sibylla Merian de Estudios Latinoamericanos Avanzados (CALAS), ubicado en el Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH).

Carmen Chinas Salazar, coordinadora general del Laboratorio Visiones de Paz, explicó que el objetivo es investigar los procesos de paz y de solución de conflictos en América Latina desde un enfoque histórico, interdisciplinario y transregional partiendo de una nueva visión del entrelazamiento entre violencia y paz.

«En el caso del Laboratorio de Paz hablamos de once profesores invitados y cuatro estudiantes de doctorado, y además podremos recibir alumnos de licenciatura para que realicen servicio social o pasantías de investigación. Durante un año y medio discutiremos en formatos como conferencias, mesas de trabajo, publicaciones y diálogos esto que llamamos entrelazamientos de violencia y paz. América Latina históricamente ha sido una región marcada por la violencia, pero también hay estrategias y acciones específicas en la búsqueda de paz. Y ese es el punto que queremos realzar: qué necesitamos discutir desde el aspecto teórico y también desde el aspecto práctico para dar soluciones a los conflictos, crisis y violencia en general que se vive en América Latina».

Los trabajos tienen carácter interdisciplinar, en el cual los investigadores abordan los fenómenos desde la historia, geografía, literatura, análisis del discurso, estudios de género, así como diálogos con organizaciones civiles que trabajan en la construcción de paz.

Dijo que la estructura del Laboratorio está definida por cuatro ejes y etapas de investigación: Discusión crítica de los términos y conceptos centrales de la paz y la violencia; Análisis de las visiones e imaginarios de paz, violencia y guerra en América Latina; Investigación de los procesos de paz y los esfuerzos concretos por finalizar conflictos, y Análisis de constelaciones pacíficas y las estrategias para mantener y fortalecer la paz, como los trabajos de recuperación de la memoria histórica para evitar o superar retornos y repeticiones.

 

Fuente: La Gaceta

Autor: Julio Ríos

Fotografía: David Valdovinos